miércoles, 31 de diciembre de 2008

Feliz año nuevo


Este espacio esta reservado para los comentarios que haran los lectores del Blog BaChotos77.

El destino no contesta


Feng, mi amigo Feng espera el fin de año en Buenos Aires.
Me ha dicho, por eso lo sé, que ha tratado de comunicarse con su familia, Shara su hija de 16 años y Shia de 6 en Lün Peng, cerca de la frontera con Cambodia. Lün Peng, lo escribo asi pero es solo una reproducción fonetica de los sonidos que Feng emite con gracia cada vez que le comento que hacemos aquí en las fiestas.
Antes de que alguien me diga algo, he chequeado en Wiki todos los datos que me dió Feng y no encontre mucho, casi nada.
Feng me mostró en su negocio de la calle Piedras una foto de Lunpen o como se llame. En la foto se ve una calle con las huellas angostas de ruedas marcadas en la tierra clara. La tierra es clara, no negra y sucia como la nuestra sino clara y suave. La calle llega hasta las casas porque la gente transita por todo el ancho de la calzada en sus bicicletas negras.
Son muchas bicicletas, demasiadas para un pueblo salvo que sea mas un barrio de una gran ciudad. Feng me dice que no, que allí todos los pueblos son mas grandes que los nuestros.
Las casas son bajas, no se ven los techos, no se de que material son pero las aberturas son grandes y algunas plantas se confunden con las estructuras hasta parecer que una selva brota de las habitaciones. Me recuerda al olor de la papaya verde, esa película de Tran Anh Hung. Lunpen se parece al pueblo de donde Mui entonces de 10 años comienza su viaje.
- Quien es Feng?, prenguta Alasypies
- Atiende en el mercado de Piedras como te dije
- Pero quien es?
Javier se acomoda en el sillon y dice como quien sabe que lo que dice no tiene ninguna importancia:
- Feng, le pusimos Feng con Pa Yi, por Feng Shui, Feng es el que acomoda las frutas en la gondola. Siempre pone un toque especial que se agradece.
- Flaco, me estas jodiendo de nuevo.Se queja Alasypies haciendo aspavientos como siempre hace
- ja ja, estas afilado en este fin de año.
- bueno, pero quien es?
- viste ese barco que quedó hace unos meses bloqueado en la rada del puerto de La Plata?.
- si. Javier mira a Alasypies con cierta sorpresa, estaba seguro que no sabia de barcos ni de nada que flote en agua.
- para el dia de mi cumpleaños recibi un mensaje de texto en el celular, jiù yuán decia y algo mas, no recuerdo ahora
Javier piensa rascandose la pera.
- Si, Jiuyuan, -agregó- como en ese entonces nos mandabamos mensajes en chino sin entender mucho lo que decian, pense que era felicidades y le contesté: Gracias en chino
- zhì xiè.
- Y si era de la carcel y te estaban engrupiendo. La Negra pregunta la Negra mirando si la puerta está bien cerrada.
- No estaba de lo mas sobrio que digamos, además, no creo que haya chinos en nuestras carceles, no, no todavia.
. Preguntale a Fabian. Presiona Alasypies
. Fabian es juez de menores, no de inmigrantes. Le contesto
- Hay chinos menores. Responde Alasypies subiendo la apuesta
- Siempre se aprende algo nuevo. Murmuro como tratando de dar por zanjada la discusión.
- Contame del pueblo de Feng, lo vamos a llamar asi o sabes su verdadero nombre. Insiste Alasypies
Javier sale de la habitación y vuelve al rato con una libreta. Busca entre las paginas y dice:
- Aca esta!
- Que?. Pregunta Jose
- xìng yùn, por eso le decimos Feng
- Te lo dijo el o lo inventaste?, apunta ya riendose Alasypies
- Uf, casi lo deletréo
- No conozco muchos apellidos chinos pero Yun, no se. Sigue Alasypies
- Miramos en la Internet y me decis!.
Javier se levanta nuevamente y trae de su escritorio de trabajo una libreta blanca, hace unos toques y muestra, afortunado / de buena suerte / fortunoso / feliz / dichoso
- Ves, tenía razón.
- Volvamos al pueblo, lupeng. Martillea Alasypies, tratando de encontrar la forma de romper una logica absurda.
- Lün Peng, Alas
- Si, buscalo.
Busca la comutadora que está haciendo las veces de fondo musical.Teclea algo y comenta:
- pèng chocar / golpear / pegar contra / tropezar
- y?
- lún, barco / buque
- Un invento, no existe seguro ese pueblo. Grita Jose como señalando que encontró el hueco por donde meterse en la conversación.
- Importa?
- Depende. Como llegó Feng a trabajar en el mercado?. dice Alasypies atrapado por la respuesta incierta.
- El barco estuvo como hasta principios de mes en la rada, estaban sin combustible y no podían seguir viaje
- No podían desembarcar?, señaló la Negra, preocupada por unos tipos desconocidos en un viaje improbable en algun lugar del mar dulce del rio de la plata. en fin, asi es ella.
- No, de la dotación de 31 personas del barco que habia sido embargado por la justicia argentina, a raíz de seis juicios iniciados por supuestos incumplimientos denunciados por proveedores y clientes del armador, complicó la situación de 17, el resto se quedo en Montevideo.
- Y como cruzaron el río?, sigue la Negra que no descansará hasta que los vea sanos y salvos
- Navegando, son unas 4 horas, no se, no soy marino. Pero se habian quedado sin agua ni comida por eso estuvieron pidiendo auxilio porque las autoridades no querian saber nada con ellos, que se haga cargo la empresa, decian.
- Tipico, seguro que ellos de quedarse varados en un barco solo conocen las peliculas. Habia minas abordo? o las bajaron en Montevideo?. Se restablece Alasypies despues de un largo trago de vino.
- No que yo sepa, Feng nunca dijo nada de minas y eso que sabe que a mi me pierden las asiaticas.
- Las mejores minas son las argentinas.
- Jose, sos inbancable, no podes defender hasta lo indefendible.
- No, hay algunas minas lindas afuera pero hasta ahi.
Asi seguimos hasta que se acabo la noche y empezó el dia y habia, alguien tenia que ir a trabajar y diciendo:
- si me disculpan, en media hora me espera mi jefe
- lavate la cara que con esos ojos vidriosos e inyectados te convienen los anteojos oscuros
- Che te acordas de la pelicula La fiaca? (alasypies)
- viejisima, con Norman Brisky (javie)
- si, y la Aleandro, muy bonita (alasypies)
- Que decia el tipo, ah si, Hoy no voy a laburar, tengo fiaca, ves? tengo fiaca y me quedo aca.
- estaria bueno eso, ademas a mi jefe le gusta el cine argentino, por ahi?, laura que estaba callada se le da ahora por hablar
- Por ahi la bruja de tu mujer nos caga a todos a zapatillazos si no te vas ahora mismo.
Salimos caminando por la madrugada hacia el centro. Las calles llenas de laburantes y chicos que volvian de los boliches en bandadas. Ambos grupos se ignoraban olimpicamente.
- juan
- si
- es cierto lo de Feng
- si
- y que paso
- el me ayudo y yo lo ayude
- como?
- no podia dejar el buque asi nomas porque los contaban todos los dias
- quien
- seguridad portuaria, la mafia del puerto
- ahh. Y como hizo
- Le consegui un cuerpo y el lo puso en su camarote con su ropa, bajo por una de esas sillas de lavar vidrios en los edificios que me presto Jose y me lo traje al barrio.
- flor de quilombo cuando revisaron y se dieron cuenta del cambio
- no, como era la epoca de la gripe aviar, nadie se metia con un chino muerto de la noche a la mañana. Ni los medicos querian meterse ahi, en esos camarotes como cuchas de ratas que, en fin, te imaginaras. Lo cremaron al toque.
- y vos le conseguiste el laburo en la verduleria
- No, si, buen, lo llame a maguila, por si habia algun problema legal, eso es lo suyo por eso nunca lo consulto pero aca si. maguila laburo para la mafia china con un tema de importación de calefactores con pcb, un quilombo. los saco de las primeras planas y hasta hicieron negocio.
- la verduleria era de la mafia china
- no
- y la conexion?
- la verduleria es de maguila, en 2001 se diversificó a otros negocios porque con el bufete legal no le alcanzaba.
- Feng sigue ahi.
- No, lo tuve que reciclar.
- Como?
- No te pienso decir mas nada Feng.

martes, 30 de diciembre de 2008

dialogos C3

En la calle 54 hay mucho espacio para caminar, poca gente y arboles añosos.
A metros está el gimnasio donde iba a buscar a Carolina cuando ella no queria verme mas. salen una tras otra y ella no, no ha ido, por que? talvez porque intuye que estaré alli.
- Dejala
- Que? tropezando
- que la dejes, no te hagas el pelotudo flaco
- a quien, quien sos? . aun sorprendido
- no te importa un carajo, dejala
Ahi, me despierto, siempre con una sensacion de impotencia como cuando el negro me cruzó y rayandome el capo del auto me sentenció; vos no podes pasar mas por aca!.
Suerte que terció el Chaza con, che, que es un amigo, dejalo...
Chaza era un personaje que conocí en mis tiempos de artesano, que fueron mas largos de lo que uno deseara pero estuvieron bien. Lo conoci en la feria de 49, un viejo hippie si se puede decir. Ahi estaban varios tipos de otras epocas y otros mundos, Tomba, zapatero, Rocambole, dibujante, Jesús, metalero, Luis, ex bancario, Ferioli, fenicio. Chaza compartia con Pinchevski el hermano del violinista y Manego un estand.
Te estoy contando esto para que sepas de entrada que soy un cagón, no te voy a salir a defender ni me voy a poner el uniforme de milico por vos, perdoname pero es así.
Gustavo apoya la cabeza mojada entre las dos almohadas, hundiendose en la sombra que cubre la cama. En su cabeza esta la sensacion de electricidad que le recorre el paladar, le eriza la piel y le moja los ojos, temor y reacción la llama, sabe que saldrá a flote pero antes debe pasar por eso, despues no podrá mirar atras, tambien sabe eso.
No está solo, en la habitación, sentada en la tenue luz que entra por la ventana está Luján. Luján en sus dificiles 15 años, tiene un pulover azul con una franja horizontal roja que ha tejido ella misma. Es la hermana mayor de tres. Su pieza, donde están ahora da a una terraza. Subieron allí al amparo de la noche por una escalera angosta. La puerta cedió facilmente y una vez adentro volvieron a estar juntos.
El aire es dulce, las lagrimas saladas, el sudor amargo.
Ella lo mira, lentamente. Hace muy poco que se conocen, se conocen muy poco aun.
La noche no se muere todavía y me despierto. Hace mucho calor y tengo que salir a la terraza, las baldosas color terracota estan calientes, mas calientes que el aire sofocante. Miro sobre los muros bajos que nos separan de los techos vecinos. Techos por los cuales alguna vez se fugo mas de uno. Porqué fugarse por los techos, porque las puertas son peligrosas, puede haber alguien afuera.
En cambio los techos, los techos tienen el refugio de las estrellas
- y el riesgo de caerte y romperte la crisma, bajate de ahi que si te ve mi vieja se arma. Lujan.
Y me baje, despacio como haciendo equilibrio. la pared es aspera como si fuera de piedra pomez. De nuevo sobre el piso caliente.
- Que calor, no?
- Es verano, espera que llegue el invierno y te vas a cagar de frio con esta estufa.
- igual
- Esperame.
Bajo por la escalera que copiaba el contorno de las paredes como un abrazo tanguero. Su mano apenas rozaba la escalera de hierro y barrotes color verde y oxido. Desapareció en la oscuridad.
Y yo me quedé solo. En la ciudad, en el centro, siempre hay un murmullo que no es ruido. Ventanas abiertas a la noche, pocas luces. El viento que susurra entre las ramas de los platanos de la avenida 51.
Me acoste sobre el piso caliente, me saque el calzoncillo y quede asi como flotando la noche bocarriba.
- que haces!. Te digo que no te asomes y ahora estas tirado como muerto en el piso, desnudo. Y ahora encima se te para!.
Me tapé. Un galán se hubiera levantado y la habría abrazado dandole un beso mortal en la boca, callandola. Yo no.
- Veni.
Habia subido silenciosamente la escalera. Yo no la habia escuchado. Traía un balde con agua. Abajo estaba la cocina y un lavadero. En la noche habia visto o se habia acordado del balde y lo trajo, lleno de agua, agua fresca.
- te lo tiro yo?
- nooo, dejame a mi.
- mas bajo te dije. sacate el calzon que se te va a mojar
Levante el balde, esos baldes plasticos, rojo este, de frescos 5 o 10 litros, de un saque me lo zampé sobre la cabeza. De golpe una cortina plateada me oculto las estrellas y de la vista de Lujan.
El agua caia en un gorgoteo por el drenaje. gloc, gloc.
- Queres mas?
- Y si te quiero a vos que decis?
- Que te doy una toalla y que te calles.
Y la toalla que tenía en la mano voló hacia mi cabeza, reboto y quedo colgando como un fantasma de mi pene mojado.
Lujan ensayó una risita y dijo:
- así está mejor, deja el espectáculo y vamos a dormir.
- vos no querés mojarte, ensaye para no dejar que se fuera asi nomas
- no, dale que es tarde.
- mejor me voy, asi no tengo que esperar a que el recorrido este libre mañana.
- bueno, aliviada.
Me vestí y empezamos a bajar, la escalera del patio, atravesar la cocina, el living. Uno de esos living de piso de pino tea, tablas largas que siempre te delatan y vos queres ser como el shaolin de la tv y no. No hay caso.
- Suerte que no estás gordo, me digo en voz baja
- chit. me reta lujan
bajar la escalera que da a la puerta de acceso.
- un beso?
- chau
- te veo?
La puerta se cerró detrás de mi.
Otra escalera mas hasta la galería, abrir la puerta plegadiza, enorme que cerraba la galeria, caminar entre los negocios muertos y salir, ahora si a la noche, el pelo mojado, queriendo tener un poco de lluvia en la cara antes de ir al trabajo. Por suerte no trabajaba yo en esa epoca porque vivia con mis padres y solo tenia que estudiar. Cosa que hacia bastante bien porque me gustaba pero no lo suficiente. Nunca es suficiente, como todos sabemos en algun momento de nuestras vidas.
- Y eso es todo.
- Ah. El doctor Siki por un momento retorna de su ausencia observadora.
- Si, tengo a veces ese sueño. pero la chica no era Lujan.
- Porqué usted le cambia siempre el nombre a la gente?, se ha dado cuenta no?
- Tiene razón!, Yo siempre pensé que era una especie de reflujo del tiempo que pasamos en la clandestinidad. Yo estaba en la política, creo haberle contado.
- si, la politica.
- si, en realidad llegué aqui por recomendación de un amigo común
- no me diga
- Malsano, fuimos compañeros en la secundaria
- Tormento Malsano?
- El.
- Si.
- Qué?
- Usted estaba diciendome sobre la clandestinidad. dice revisando sus notas.
- Ahh. Pero eso fue hace mucho tiempo
Silencio
Miro, observo, pienso que no se que hago ahi. Suspiro. Pienso que ya pagué. Pienso mal de Tormento. Me arrepiento porque el no tiene la culpa.
- Y, borrabamos todo, las agendas, las guias de telefono, los regalos, los libros con anotaciones, las cintas...
- que cintas?
- yo tenía un sony portatil. Hoy sería ademas de una pieza de museo una valija pesada. Pero lo llevaba a varios lados y tenia cintas, casettes les deciamos en esa época.
- Siga
Suena un timbre quedo a lo lejos.
- Y nos llamabamos por otros nombres, no nombres de guerra tipo, el angel, el tigre, que se yo, no otros nombres comunes
- un codigo?
- si.
- Notable.
- por?
- las sectas, tambien las religiones suelen asignar un nombre distinto a las personas que se suman a ellas, como un renacer
- le regalo mi renacimiento entonces, terminamos acá?
- Si usted quiere?
- Nunca me va a dar nada sobre lo que pueda trabajar?.
- Esta usted trabajando sobre si mismo, no lo hace tan mal
- gracias, necesitaba eso.
Saliendo uno se cruza con los que esperan casi siempre pero aqui no.
El dr Siki atiende en un departamento interno de la calle 3. En el departamento 1, atienden unas chicas, y no se si son clientes o no, ni de quien los personajes que cruzo en el pasillo.
Una morocha está parada casi junto al arbol de la calle, un robusto acer negundo, de esos que insisten en quitar de todos lados. No es un arbol lindo pero la morocha si y esta cantando con voz gruesa y ronca.
- Yo tengo unos ojos negros, quien me los quiere comprar?
Me apuntaría pero no. No hay peor cosa que la persona que se enamora y yo me enamoro facilmente.
- chit
- doctor Siki?
- quiere que lo alcance?. Sacando una moto verde manzana, un sueño que en manos del dr, podría facilmente convertirse en pesadilla.
- me gusta caminar, gracias.
- como prefiera y arranco, no sin hecharle una mirada a la morocha y decirle;
- Para comprar hay que saber vender
- Ja, ja, nos vemos Poyo!
Le quite el candado a la bici, me subi y me fui. Cantando bajito como quien no quiere saber mas, Primero hay que saber sufrir, después amar, después partir
y, al fin, andar sin pensamientos, Perfume de naranjo en flor,promesas vanas de un amorque se escaparon con el viento.

sábado, 27 de diciembre de 2008

agua de azahares -causas y azares




los azares de la vida: estar en el lugar justo, en el momento justo, con la cámara a punto y que Miguel tuviera la habilidad de hacerlo -es decir que estuviera la persona indicada- fueron las condiciones de posibilidad de la existencia de esta foto.

Leo The Music of Chance de Paul Auster y, leyéndolo me pregunto si el título en castilla no debería ser La música de la casualidad, más que La música del azar, como fue traducido. Sobre todo por el contenido del libro.

las casualidades de la vida: estar en el lugar equivocado, en el momento equivocado y ser la persona equivocada.

viernes, 26 de diciembre de 2008

round trip

Va caminando rapidito, a pasos cortos que pretenden una energía de la que cualquier espectador desconfía. Va rapidito pero está un poco torcido -para adelante y hacia un costado. Quien lo mire puede pensar que en cualquier momento se va a caer, porque va caminando por el mundo como si estuviera en falsa escuadra. Está bien vestido, dentro de los parámetros de hace unos cuantos años. Va vestido como para hacer deportes, pero cualquiera que lo mire se da cuenta que ya no puede hacer ningún deporte. Va caminando rapidito y se aferra a una bolsa -no se sabe si él sostiene la bolsa o es la bolsa la que evita que él se caiga o se vuele.
Va caminando rapidito, con la costumbre de toda la vida de estar apurado. Pone la cara que, recuerda, es la de los que deben estar en dos lugares al mismo tiempo porque son imprescindibles. Pero él ya no tiene nada urgente que hacer. Él camina rapidito porque le parece que si se apura en una de esas le gana a la parca que lo viene corriendo.
[Del polvo venimos y hacia el polvo vamos]

martes, 23 de diciembre de 2008

Dialogos c2


- Como estoy ahora, resfriado, no puedo contarte nada mas, mejor llamame mañana por la noche!. Dice Juan y se va a sufrir su resfrío.
Pablo, del otro lado sabe que si hay alguien bien flojo con las enfermedades es Juan y dice,
- Mejor, esas son cosas que no se hablan por teléfono!, nos vemos.
Las sabanas estaban frescas como hojas de papel tisú, el perro, negro, blanco y rosa parece una mancha equivocada en el medio. Primero hay que saber sufrir!, fuera bicho!. Pero el coso no se mueve y peor, empieza a dar vueltas como molinete hasta que vuela la alpargata con destino incierto sobre sus orejas.
- Chau perro.
Me meto en la cama como si me probara un traje a medida.
Doy vueltas en la cama, a uno y otro lado, la soledad no me ayuda, siempre necesito molestar a alguien para dormir mejor.
Le digo a Lucia que lee y no me deja dormir:
-Ayer volví de Buenos Aires con suerte, encontré un asiento libre, no tuve que esperar mucho, sali temprano.
- Ah
- Pero a mi lado iban tres chicas,
La miro de reojo a ver si se distrae y puedo hacer que apague la luz,
- ni lindas, ni graciosas y conversaban entre risas.
Me imagino en el micro, sentado incomodo, viendolas en el asiento de atras a la izquierda. Una esta de pie.
Para colmo de males no sólo conversan entre ellas sino que todo el tiempo les suenan los celulares -que suenan muy fuerte y con músicas horribles- y todas las conversaciones empiezan igual:
- Aquí estoy, en el colectivo yendo a La Plata.
Inmediatamente viene una precisión, que a nadie le interesa, acerca del punto exacto en el están: subiendo a la autopista, por el peaje de Hudson, bajando la autopista.
Piensa:
- Esta generación está creciendo con una costumbre nueva, la de ser monitoreados por satélite. ¡Qué lo parió!
Digo un poco enfáticamente, tratando de captar la atención
Ahora estoy despierto, no tengo mas ganas de dormirme.
- El otro día la Bruja me dijo que una gran diferencia entre el pasado y el presente es que acerca del pasado la dificultad está en encontrar registros de la vida de los sectores populares
Me mira con un ojo para ver si estoy hablando en serio
- Bruja?
- (sigo) y que en el presente el problema es discernir qué vale en la selva amazónica de fotos digitales, videos, grabaciones, llamadas telefónicas, imágenes tomadas con los celulares.
- Bruja?
- Laura, digo laura, la bruja
- Es rara esa chica
La abundancia y la escasez se encuentran de una manera notable, piensa el tipo ya definitivamente resignado a no dormir.
En su cabeza, las "chicas" siguen chillando como monas excitadas. Puede verlas de arriba abajo.
Todavía resuenan en mis oídos esas risitas incontenibles pero ninguna de las palabras. Porqué serán importantes las palabras?
- El mundo esta lleno de esas cosas simples que pasan sin dejar rastro. El pasado esta lleno de ellas, casi a reventar, la historia no, la historia esta llena de hechos importantes, que marcan el antes y el después, mas bien que pretenden. Para mi, la historia siempre fue demasiado pretenciosa aunque también apasionante, si esta bien contada.
- Eso lo decís vos o también es de Laura?
Lucía ahora esta fastidiada, no la dejo leer ni dormir.
- Mio. Creo que esos otros momentos simples aparecen cuando uno para, se revuelve sobre uno mismo y siente. El otro día me acordaba de todo un día en la escuela de tan solo palpar la corteza de un joven tilo. En el patio de la escuela había tilos añosos y otros jóvenes y con las hojas hacíamos Plop!.
- Tiraron la victrola por la ventana! entro alguíen al trote
- Quienes?, a coro
- Los agarraron, Están en dirección! un tercero que se tropieza al llegar
Pato, Pablo y Gustavo eran una furia irremetible que saltaba ventanas, corría árboles, flotaba figuritas en los zócalos. Su lugar natural era la dirección.
- Simple, nosotros dejamos a una colgada de una ventana del segundo piso porque era una histerica. Te parece simple?
- No, me parece una salvajada
Me doy vuelta y me duermo instantaneamente ahora que se que Lucia no podrá dormir por un buen rato.
En el sueño, escucho:
-Ellos no hubieran podido matar a nadie!
-No, no creo, ni siquiera por diversión aunque por estar aburridos en otra época tal vez..
- Escúchenme, ya les dije que no iba a ventilar este asunto en público, no jodan mas por favor!, dijo uno que mientras sudaba profusamente- podría haber sido Gustavo que hacia unos días que estaba enfermo y el calor del verano lo hacia transpirar.
Eran las primeras horas de la tarde y afuera las chicharras atronaban, el silencio era glacial y en la calle ni los perros asomaban sus hocicos fríos.
Debia ser Gustavo si.El camino a la casa de Gustavo pasaba por la Plaza de Rocha, una cancha octogonal poblada de enormes tipas blancas que en estos días cubria el suelo de una alfombra amarillo oro. En el medio, una ominosa mole de cemento con figuras antropomorfas propias del constructivismo mas clásico. Gustavo pasaba por ahí antes de llegar a lo de su tía, frente al Teatro Argentino, donde cuando era chico se cruzaba a jugar en el jardín de la paz o de las naciones.
Gustavo construía historias, guardaba todas para sus amigos y no dejaba ninguna para el, excepto esta ultima y eso lo tenia mal.
Había sido un pez en el agua hasta finalizar la escuela secundaria, tenia en sus amigos un paraíso personal, pero a medida que la diáspora se fue acentuando, su mundo se fue achicando.
Lo encontré una vez, hace unos 20 años adiestrando perros en un parque. Lo peculiar es que el era un bicho de departamento, nunca le conocí una mascota, ni siquiera uno de esos peces dorados en bolas de vidrio, ni una planta, pero allí estaba. Supe, me contaron que le había dado por hablar a los perros y como siempre ocurría con sus historias, estos lo escuchaban y así se hizo perrero.
En otra oportunidad, lo encontré haciendo transporte escolar, llevaba chicos a la escuela de mis hijos. - Hola, que haces acá?, - Tengo un transporte escolar, me va bien. Supe de inmediato que estaba tratando de recrear sus tiempos de la infancia sin percatarse de que entretanto, había crecido.
De tanta búsqueda, el tipo se estaba enfermando, gravemente. En su impotencia, arrojaba golpes al aire que desafortunadamente en ocasiones encontraban un blanco inocente en el camino, lo que le acarreo algunas duras respuestas. Hasta que un vecino lo condujo a una escuela de artes marciales, aprendió pero no pudo llenar su tristeza interior. Conozco a Gustavo desde los 4 años y no me había dado cuenta de nada de esto hasta que dio la casualidad de que compartimos el mismo medico chino.
Tito (perdón, debería aclarar que tiendo a llamarles Tito a quienes me encariño aunque sepa cuales son sus nombres de pila, Tito es como hablarles a alguien que esta dentro de ese nombre, a su nombre verdadero, el cual por supuesto no conozco), Gustavo esta bien?
- Usted siempre igual Dividiendo y apartando, eso no lo llevará a nadie a ninguna parte.
- (tratando de estar aquí y ahora), es que, me gustaría que estuviera aquí.
- Le diré esto y nada mas, porque entiendo que su destino y el de el tienen algo en común que tendrán que descubrir un banco de Peces. El favor llega a través de las damas de la corte. Fundamental, Todo sirve al Progreso.
- gracias tito, creo que puedo con ello.
A mí siempre me habían gustado las metáforas chinas, leía cuentos chinos de niño y eran los que mas me gustaban
Un campesino de las tierras del sur no encontraba su hacha en los lugares donde la guardaba y sospechando del hijo de su vecino comenzó a observarlo. El muchacho era bastante holgazán, siempre estaba por ahí husmeando y no le había caído simpático nunca. Observó la manera de caminar del muchacho –exactamente como un ladrón, se dijo. Observó la expresión del joven –idéntica a la de un ladrón, con esa mueca ladina. Observó su forma de hablar –igual a la de un ladrón. Concluyó que todos sus gestos y acciones lo denunciaban culpable de hurto pero no tenía aun las pruebas.
Días más tarde, encontró su hacha en un valle que no solía visitar. Y después, cuando volvió a ver al hijo de su vecino, todos los gestos y acciones del muchacho le parecían muy diferentes de los de un ladrón. Abajo, al pie del libro de tapas duras y cerezos en flor decía, Lie Zi.
- Me gusta esa historia. Suele pasar mucho con las mujeres, los hombres piensan sobre ellas que se ofrecen y en realidad es lo que ellos quisieran que ocurriera.
- Hablas como en el libro, en infinitivo.
- bueno, parece mas serio pero es cierto, los gestos dicen muchas cosas pero nos quedamos con una versión, mas frecuentemente la que nos conviene.
- Obvio
- Mira, acá tengo esta foto, quien es la morocha de abajo a la izquierda?
- No se, la conozco?
- Si, el Lucia, hermosa no?
- eso lo decís por la charla del otro día, de las mujeres que nos gustan
- je je, si, a veces soy muy traicionero
- Si pero tenés razón, una foto puede mostrar mas de una persona porque la pone en un contexto determinado y nos obliga a leer lo que pasa ahí.
- sin embargo el decir hermosa es una convención, quiero decir que hay algo entre ella y yo, eso es lo que me gusta.
- lo dicho, raro como perro verde.
- una cerveza fría?
- gracias, soy celiaco y me haría mal!
- tengo un vinito blanco, ya te digo y sale a ver que tiene en la bodeguita de la amistad, un Chardonnay sino tendrá que ser un "methode champenoise" local bastante bueno.
- Me quedo con el Chardonnay. Que raro, pensé que no tomabas blanco
- Es que por ahí viene Pato y es lo único que toma. A el le gusta el vino rasca, de 3 pesos pero yo le pongo uno mejor en la botella de Arizu y me lo acepta.
- Ja ja, ese Pato.
- Sabias que se muda no?.
- Si, adonde ira a parar?
- Encontró una casa baratita para comprar con la venta del depto pero no tiene para señarlo, pensé en vos
- (silencio, piensa en como convencer a Lucia del préstamo)
Ay los amigos. Los viejos amigos de la infancia tienden a veces unos lazos que no se rompen con nada. A veces no, a veces hay hechos que hacen trasmutar ese amor en intolerancia -tan indestructible como ese mismo amor.
Pero no es el caso con Javier, Gustavo y el Pato. Hay una incondicionalidad que no se improvisa.
Se sirven el vino y la cerveza y se sientan en el patio debajo del árbol en un juego de jardín de hierro, como los de la infancia. Cae la noche.
La cumbia suena, pegajosa como siempre. Asocio la cumbia con el verano aunque suena todo el año. No hay mosquitos, es la Niña y la seca espanta hasta los muertos. En los pueblos el aire se lleva los últimos pesos y deja la esperanza para la próxima pasada. Lloverá?.
En otra parte de la misma ciudad Laura habla con Tormento Malsano por chat. Se han acostumbrado a esa nueva modalidad del diálogo desde que ella volvió de Estados Unidos y él sigue viviendo en Buenos Aires.
Estuvieron chateando desde la mañana con intermitencias. Hablaron de de todo un poco: de Paco, el hijo del Gordix que entra este año a estudiar historia, del laburo, de la salud y la enfermedad, mucho de Los jaivas porque Laura de golpe se acordó de la letra del Pregón para iluminarse y le agarró uno de esos ataques de impaciencia que le agarran de escuchar una determinada música, de las choteces físicas del uno, de los descontroles de una otra. Lo que ella extraña es la risa, porque en el chat la risa se traduce en un je je o en un ja ja, y a ella le gusta escuchar la risita estilo Patán de Tormento que es tan difícil de lograr, porque el tipo es exigente en todo y ella, desde hace más de 30 años, ejercita una forma del humor específica para lograr que el tipo se ría.
Tormento no está haciendo música ahora y Laura lo lamenta en serio. Por alguna razón Jose le hace acordar a Tormento y trata de que se hagan amigos, pero no es fácil porque ambos son huesos duros de roer -tal vez sea por eso que los vincula.
Cae la noche y Laura se sirve una cerveza. Hace mucho calor.
Vengo de la luna al mar, voy de paso por esta ciudad. Buenas noches señorita.
Traigo lunas para su jardín...
Zumbona entre los tilos.
- Juan, fue el concierto de primavera no? (la gente de la plata usa mucho el no como afirmación o como pregunta, color local)
- Nooo, como te acordás!
- Me acuerdo porque en esos días casi nos toca
- que?
- Estábamos con Guillermo haciendo boludeces en al aula y así nomás, de una patada le hicimos un agujero del tamaño de un puño al pizarrón. Hoy no pasaría nada pero en esa época te podían llevar preso, daño intencional a los bienes del estado, amenaza a la seguridad publica, subversión, que se yo, hoy decir eso es un disparate, entonces era normal.
- y que paso?
- el profe, nos hizo la gamba y nos cubrió mientras una comisión se rateaba para comprar y recolocar la parte rota del pizarrón. Todo con la venia del jefe de disciplina. Contradicciones del sistema, la GESTAPO encubriendo a los judíos.
- Si, a nosotros nos paso algo parecido, te acordás Laura?
-Sí, unos cuantos Schindlers, como quien dice, una larga lista de Schindlers. Al Gordo y a mí nos salvó Oliva de más de una. A mí de más de una falta cuando la cosa se puso fea y yo no sabía dónde me tocaba dormir cada noche en el 76 y al Gordo de esas cagadas que se mandaba -y después ponía cara de perra a la que se la están culeando. Y ahora que pienso al Ershul también le salvó la vida la vez que puso poxiran alrededor del practicante de historia y le prendió fuego. Ahí todos fuimos salvados, porque cuando finalmente, después de varios intentos infructuosos, el hilo de fuego corrió, todos nos pusimos a bailar una danza india de nuestra invención alrededor del fuego. Fue lindo.¨
Pero volviendo a la fiesta de la primavera del 76, yo me la acuerdo con pelos y señales.
- sabias que todo empezó ahí no?. Digo, la historia que terminó matando al punto. De que te acordás?
-Te digo que me la acuerdo con pelos y señales pero cuando tengo que concretar lo que se me vienen al galope son sensaciones e imágenes. Por un lado, todo el día en el campo de deporte y el Loco Actis totalmente en pedo. A mí me daba miedo, eso me lo acuerdo patente patente, como decía la Chona. También me acuerdo que se rumoreaba que Actis tomaba vino con Rohimnol, y que por eso tenía los labios morados ese día.
A la tarde nos fuimos al Colegio y hubo un recital en el que tocaron compañeros nuestros. Me acuerdo perfectamente del Loco Fino Con una galera enorme blanca, ¿te acordás? Y del Gordix y Marcelito.
- Pero no tengo idea que lo de matar el punto haya empezado ese día. Contame.
- lobo suelto, cordero atado. Con seis meses de proceso, uno estaba semi clandestino.
Se toma el tiempo para recordar o para hacer que el aire que de pronto se ha vuelto denso como un tiro de escopeta a dos metros, se convierta en el aliento que le falta.
- Había una banda ...
Las caras pasaban pero no se detienen. Porque no puedo acordarme del momento en que el punto le saco la guarda a Mariela?. Los comunistas la pasaban mal y mara era muy bonita y atractiva. Los machos la seguían con la tensión alerta pero seguro que alguna lesbo estaría cerca. La relación entre mujeres era muy jodida y te podía llevar rápidamente a la zanja o al lugar de donde muy poquitos volvieron. Se ensañaban. Para peor, los grupos políticos solían rechazarlas, también a los homo. Ese día de la primavera no es el que recuerdo, tratando de estar lejos de todo y cerca al mismo tiempo.
- Escondete, te están buscando!. No te puedo decir más pero esto es muy serio.
Y me fui, en cada auto un grupo de tareas, en cada árbol un servicio, en cada zaguán una puerta de escape. Esperar la noche en un descampado, esperar un mensaje mas claro, más alentador.
Cerca de casa esta el paraje de la magdalena, un puerto fluvial muy chiquito sobre el mar de Solís. Hay un arroyo con altos árboles y densos juncales que alternan con unos prados de césped verde esmeralda. Una casilla de prefectura es la única presencia visible del estado.
-Pero no entiendo, ¿te fuiste a Magdalena? Habla claro porque estoy medio pelotuda y no entiendo mucho las metáforas. Ya sé que un poco de ambigüedad es para ti la mejor fruta, pero en este momento quiero datos claros. Estamos hablando de lo que estamos hablando, no de metafísica nene.
-Uy, qué intolerante!
-Ya te dije que estoy más pelotuda que de costumbre. Y hoy estoy especialmente intolerante porque me está dando negativo el balance de fin de año: mal en el laburo, mal en amores, mal con la tesis, descontrolada con el pucho ...
-Entonce comprate un billete de lotería, que si te va mal en todo lo demás en una de esas te va bien en el juego. Y no exageres que te está yendo lo más bien, lo que pasa es que te inventás que la vida puede de otra manera.
-Siempre interrumpís los cuentos con alguna reflxión introspectiva. La sigo: el descampado, los juncos de Magdalena, Y el miedo, sobre todo el miedo.
Laura suele hacer esto cuando está fastidiada. Como muchas mujeres que trabajan, quiere mantener el control a cualquier costo y cuando no pueden, como casi nunca podemos salvo que el mundo se reduzca a casi nada, disparan.
Se ha puesto a leer emilios en la computadora, son las 3 de la mañana y sabe, sabe bien que en un rato me levantaré, abriré la puerta negra que da al ascensor y saldré a la calle a pasar un rato con los travestis.
- Jap, te rajó la bruja!
- brrr!, querés un trago antes? no tengo vasos hoy.
- ke no te raspes querid, apunta la o el personaje color azul violeta lustroso. Mide como 2 metros y tiene mucho éxito.
- no, protegido de Obama, no hay problema, estoy vakunado. No hay humo de marihuana, usan una mezcla de mezcalina con maria en pipa de agua que no da olor. En el auto, un taunus sedan de los ochentas una musica de ska suena bajito, el jefe está ahí, a oscuras, negro.
- Estuvieron los azules, -... preguntaron por vos!
Es un aviso, si fuera en serio no se hubieran puesto el overoll, cosa de juanpi, ese ortiva piensa que porque lo conozco desde que pateaba latas por el bosque le voy a dar info sobre el caso. A mi que me importa lo que le pasó al punto!.
Seguro que Laura le dijo algo, buchona!.
Piensa un poquito y se da cuenta que no hay razones objetivas para sospechar siempre de Laura. Pero él siempre sospecha de Laura.
Suena el telefono, uno de esos rings viejos, triin, espera, trinnn. Nadie contesta, no hay nadie. El timbre calla y llaman de la calle.

Fin del capitulo dos por fin de año.

lunes, 22 de diciembre de 2008

A tiempo para equivocarse

el aire se detiene, puedes guardar silencio?
siento tu corazon latir, puedes callarlo?
vas muy pero muy rapido,puedes parar?
el ultimo vaso de vino se ha vaciado, puedes recordar el primer sorbo?
sigues pensando?, no era mi intención.

domingo, 21 de diciembre de 2008

sin titulo

Sin texto.
Has visto en la ventana blanca la angustia del tiempo perdido?
Si no la has visto, nunca sabrás de que estamos hablando.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Dialogos


Vos nunca estuviste ahí!
Haciendo que?, a mi no me gusta, no me siento cómodo cuando otros están así
Así como?
Snifeando

Hacemos un silencio breve porque se abre la puerta.
Laura, que haces acá?
¿Que están haciendo? pregunta Laura. La nariz sirve para que las cosas salgan, no para que entren. Y el único esnifeo que me banco es el que se produce durante o después del llanto.
Dale, probá un poquito, dice el que te dije, no seas puritana y prejuiciosa.
No es cuestión de juicios morales, la cosa es que no me gusta, y menos me gusta el efecto.
Laura dice todo esto desde la puerta y Javier, que hasta el momento se había quedado callado y mirando al piso dijo: la gran puta!, ahora me doy cuenta que uno de los problemas de la vejez es que las pitucas que se caen están perdidas para siempre!
Laura ensaya un mohín que es una señal de que necesita que alguien la trate mejor.
No podrías ver ni si fuera tan enorme como un hipopótamo violeta como la vaca de chocolates, la tenés entre las tetas y te vas a quemar...
Ayyyyy, ves que sos un pelotudo!, los tipos son todos iguales, corren atrás de nosotras como perros, a veces como perros sarnosos y desgraciados de esos que les falta la piel, estoy alucinando-
Ji hi, vení que te doy un poco del óleo s31 para esa quemadura. Levantándose penosamente del sillón bajo, amorfo y negro que es casi el único mueble del departamento de Laura.
Ahora que lo pienso mejor, mejor me quedo acá, sentado. Estoy bastante mareado, que yerba era esa?
Nos quedo de la goleta, claro vos te rajaste a Paris y te perdiste el barco.
Abro un vino, tenés unas copas en algún lado de este quilombo desnudo?
En la casa desnuda de Laura no hay copas. Sólo vasos porque las copas las dejó en la casa que abandonó casi como una prófuga. Trae vasos y sirve el vino. Sigue ciega, como desde los 10 años pero un poco más, y se deja maltratar. Piensa/siente: todo sea por el cariño con el que me maltratan.
Laura dice algo acerca de algo que leyó en un libro que leyó que está tirado en el piso -y que la mata de amor- y se hace la superada. Se ríe porque el fumito de la goleta está bueno y porque prefiere hacerles creer a todos que es una persona leve -aunque es pesada como collar de melones.
Javier, desde el puff amorfo, mira con ojos de perro azul y Laura piensa que por qué sufre tanto. Piensa eso y dice algo acerca de alguien que le ...
Me estas esquivando, sufrir?, ni vos ni yo sabemos lo que es sufrir, pero como siempre somos el centro de nuestro mundo y nuestro sufrir tiene algo de razón.
Eh, te preguntaba por la goleta porque ahí estuvo uno que vi la otra tarde en el despacho del ministro. Uno de esos personajes grises de todos los días que se llevan jugosos negocios a sus bolsillos.
Y vos qué hacés en los despachos de los ministros, Javier? Yo creo que nunca entré al despacho de un ministro. Dijo mientras pensaba y tarareaba en la cabeza, "Erró como todo llanto", que es lo que tararea casi todo el tiempo hace meses porque hace meses sabe que su sufrimiento es el error que la convierte en perdedora. Laura sabe que hay dos diálogos: el que se escucha con los oídos y el que no se escucha, pero ahí está. Y en ese preciso momento se da cuenta que la charla acerca de ministros, goletes y otras menudencias aturde otro diálogo que nunca resonanará en otro ámbito que no sea en las cabezas, al menos en las cabezas de Javier y de ella. Y que es un diálogo un poco hostil. Cambia de tema en el diálogo de afuera e intenta sofocar el diálogo de adentro.
Dice un chiste malo acerca de hombres grises -No lo vi a Natalio Ruiz en la goleta-, se ríe como una boba, sirve otra ronda de vino para toda la concurrencia y se acuerda que tiene unos bombones deliciosos que rápidamente socializa. Comer chocolate es una buena forma de cambiar de tema y es un buen intento de cambiar el clima tormentoso que se le está instalando en la cabeza.
Hasta donde me contó, en agosto cuando viajaba a Buenos Aires por motivos inciertos, sentía vibrar al auto, cada vez más fuerte, iba mas rápido, más vibraba, más lento mas vibraba. Que hacer? de mecánica no sabia nada pero al frente a unos trescientos cincuenta metros una estación de servicio. Cada vez mas despacio, cada vez mas ruido. El auto se inclina y cae, la rueda sigue su curso hacia los surtidores.
- Que ojete señora, disculpe, pero que ojete.
No pudo bajar del auto hasta 10 minutos después.
Javier dice que vamos a terminar asesinando a alguien.
A Laura le gusta bastante la idea pero se pregunta si se van a poner de acuerdo con el "blanco", como dicen los documentos del archivo de la policía en el que ella trabaja.
Laura tiene blanco elegido, pero piensa que es demasiado obvio y que todo el mundo la va a culpar a ella. ¿Quién será el blanco elegido por Javier? Misterio, como casi todo con ese tipo.
No piba, de ningún modo, no vamos a matar a nadie, la cuestión es que el punto ya esta muerto. La cuestión es así, no se todavía como ni cuando pero en la casa del flaco, hubo una serie de roces, no se si me entendés, a lo mejor si te digo franela como se le decía antes, hace tanto que creo que fue antes de que fuéramos chicos.
Viste como es la escalera de ese edificio, aburridamente mediocre, tal vez por eso, se le fue la mano pero la cosa es que hubo un permiso. No hubo prisas, ya a esta edad no hay prisas, se tomaron todo el tiempo para seguir el roce suave de las yemas de los dedos sobre, sobre todo.
En la habitación hay muy pocos muebles y eso hace que se sienten en el piso, y siguen. Los otros, aun no se dan cuenta o si y no prestan atención o disimulan, alguien, tal vez el gallego Bimbo se empieza a tocar. Los cuerpos porque a esta altura no importa más si son ella, el, aquel, esa, es una marejada de movimientos suaves en la penumbra. Si una mano atenta, desenchufo el velador, tiro una planta y cayo de espaldas. Había alfombra, creo que no. El olor a cigarrillo era insoportable, como el acre de la yerba del charuto largo y bien armado con dedos hábiles y perversa intención.
- Y vos, vos que hiciste?
- si vos estabas ahí, no viste que no me decidía?
- libriano puto!.
Yo no vi nada de nada. Estaba ahí, sentada en el piso al lado de la ventana, entre Miguel y Jorgito, pero no vi nada de nada. Y creo que subí por el ascensor y no por la escalera. ¿Qué me perdí?
¡Jamás te diría libriano puto!
.And So soon, the very killer is comming into scene.
- Pero porque decís eso, si el punto ya esta muerto, para que el as..., esta es la escena del crimen?, como en las películas de los 40?
- No, no se, podría ser pero habría algo, algún indicio, una marca, una mancha, algo que falta, un tic en su cara, un no transitar por ese lugar.
Pero no, esos son recursos de los novelistas del Séptimo Sello, recuerdo que cuando a Aro lo apuñalaron el tipo desapareció, aunque al tiempo se lo volvió a ver en el pueblo, el pueblo fumon, smokyHill town. Pero tendrías que preguntarle a el, pero que no te muestre la cicatriz, tiene un cierto problema con su libido y no quisiera que lo importunaras.
- Sii
- Que te dije, tomalo con calma, seguro que el 27 tendrás tu oportunidad.
Los vasos están ya vacíos hace un rato pero entre el humo nadie se ha dado cuenta. Es tarde y esta todo cerrado. Habrá que esperar un par de horas y alguien vendrá con alguna botella a medio camino.
A lo mejor entonces pueda, eso espero, aclarar mis ideas y saber si alguien me contó o lo vi o solo estuve conversando con el matasiete. Le digo matasiete porque ya no es la persona que conocí, el hecho se lo ha comido por dentro.
Conversando con el, el pasado agosto, me hizo referencia a un entierro clandestino, no eran muertos suyos, o si pero no los había matado el. Creo que ahí fue donde comenzó su transformación. Nadie pasa por el plomo así nomás, tampoco nosotros, no Lau?
Laura esta en la ducha, escucho el agua correr por la rejilla con un gorgoteo de... que es ese ruido?,
Salto, un salto silencioso porque no quiero hacer nada que me ponga en evidencia, no me han visto, ni me han oído, abro la puerta entreabierta del baño y dos cuerpos se solapan entre los vapores,,
que?
podes llamar idiota!
Cerré la puerta, no era Laura, salí a la escalera y baje- Ya en la calle no pude precisar si era el departamento que Laura había alquilado. Estoy muy cansado.
Mejor voy a casa caminando a ver si se me evapora el alcohol y el humo, aunque se que llegaré a casa con las 3/4 partes de la carga encima, a meterme en el baño, bajo la ducha, así, vestido.
En mi mano tengo todavía un papel, un pedazo de papel de agenda, color amarillo donde anote, seguro que es mi letra porque no la entiendo bien,
- Que anotaste?
- Que, y vos que haces acá?
- Vos sabes donde estás?, Ey
- Si, 45 rue Saint Denis, la Sebastopol esta a la vuelta de la esquina y ... no, estoy en La Plata, ahora lo veo bien, adonde vamos?
- A casa.
- Y ese papel?
- Anote algo, lo veo mañana, ahora no tengo los anteojos.
Un tiempo mas tarde llegue al portón gris de mi casa, los obreros en la puerta me miran como ausentes. Las ropas gastadas, el calor corporizado en sus caras cansadas antes de empezar el día.
Entro. Ayelen duerme con Santiago, el perro no aparece, tampoco Lucia, solo una vaharada de aire tibio me roza al abrir la puerta. Paso. La maquina esta ahí, escribo.
LLegué!
Me pongo los anteojos y rescato del bolsillo el papel donde he escrito, SCIRE $ SAPERE & algo borroso como EXPERIOR
O no es mío, o estaba peor de lo que suelo estar!
En su casa, Laura está perdida, el dialogo con su informante del crimen se ha vuelto confuso y no es joda, quien te va a desembuchar un hecho tan pesado así como así, salvo que seas o te sientas culpable.
Mientras tanto Laura se queda sola en su casa vacía. Las visitas se han ido yendo de una en una y ha tenido que bajar a abrir la puerta una y otra vez, pero no recuerda quién se fue primero. Está sola, la casa quedó enquilombada a pesar del vacío.
Ahora tengo que achicar el pánico, piensa mientras levanta vasos, botellas, platitos con restos de queso, de aceitunas, de nueces. Acostarse con todo tirado por ahí no es una buena política, porque no solamente garantiza un acostarse culpable sino también un despertar horrible.
Tiene el mate a mil, a pesar de que está muy cansada. Piensa en las cosas dichas y decide que en vez de irse a dormir directamente se va a dar una ducha para sacarse la sputza del día. Abre la ducha, se saca la ropa y cuando el baño está lleno de aromas y vapores le parece escuchar un ruido como de puerta que se abre. Saca la cabeza por la cortina de la ducha y lo ve a Javier que la mira como si hubiera visto al demonio. En una mano tiene un cacho de papel, en la otra un tramontina de los que ella acaba de lavar. Se miran unos segundos y Javier sale corriendo.
¡Qué carajo le pasa a este tipo? se pregunta. Y se pone a pensar, mientras sale de la ducha y se seca, que a Javier no le sienta el fumo. Estuvo toda la noche meditabundo, y los únicos comentarios que hizo fueron más misteriosos que de costumbre. Hace tiempo que Laura tiene la impresión de que Javier le quiere advertir acerca de algo o de alguien, y que lo hace de una manera poco clara. Laura cree que Javier cree que ella está en riesgo.
Hay alguien peligroso en este viejo / nuevo grupo de amigos reencontrados, y ella que creía saber quién era el asesino ahora se pregunta si no es Javier, o si Javier no la estaba advirtiendo acerca de sí mismo.
Con el piyama puesto va hasta la puerta del departamento, que ha quedado abierta de par en par. Otro misterio hasta que se da cuenta que no está el segundo juego de llaves que había dejado apoyado en la mesita del living.
Cierra la puerta, prende un pucho, se sirve un resto de vino, va a la pieza y saca la Smith & Weston de su tío abuelo, que fue caudillo radical de Tandil en tiempo de los conservadores. Nada la excita más que el frío del metal pesado sobre su mano tibia. Juega con la idea de matar, otra vez como hace tantos años, juega con la idea de matar.
NECIA, dice una voz a sus espaldas. Y un soplo de viento se mete por la puerta de entrada.
- Me tiene las bolas por el piso, lo mato, un día de estos lo mato
- que?
- si como te lo digo, así me dijo el lámpara que Alex le había escuchado al punto (no denunciare a la fuente) y estaba muy nervioso!
- Déjate de joder que vos no sos periodista y además de los códigos de divulgación nunca respetaste ninguno, apunta Gustavo desde el pasillo
- Que haces vos por acá, no tenías que estar con tu mujer?
- Si, vine a avisar que a Marina la ven mañana y estoy preocupado, avisaba porque por ahí por un tiempo no me ven mas
- eeh, no te pongas así
- y vos no te hagas el boludo y desembucha
- lo que?
- la nota que te dejo el fiambre.
- ah, vos sabias?
- ya te dije que no podes guardar un secreto y menos si esta escrito
- Sire, sapere, experior.
- Laura entra a la red y lee, aquello que se sabe por lo que se dice.
- Tiene lógica, te contaron algo mas y no lo estas ...
- pero sapere no es saber?, y yo no se, te juro que no se o por lo menos no lo entiendo!
- sapere es aquello que se sabe porque se lo ha saboreado una vez!. Saber, sabor, parece que son familia, mataste a alguien alguna vez?
- de un hondazo
- queee
- un chingolito, estaba parado ahí, a un metro sobre el alambre y le corte la cabeza con un bulón, todavía me tortura esa imagen, sangre por todos lados. Los chingolos tienen sangre dulce sabes?
- aterriza que nadie se preocupa por un chingolo, hablamos de gente!
- no que yo recuerde, pero con mi mala memoria podría ser.
- Un pelotudo, tremendo pelotudo que dice cosas incongruentes
- y experior?
- es aquello que se sabe porque se lo ha experimentado repetidas veces. Como hacen los científicos de puro masoquistas penosos.
- si, una vez recuerdo de haber estado en uno de esos caminos de la Patagonia, sin alambrados ni ganado a la vista, solo unas lomadas, arbustos chaparritos, arena y viento, si mucho viento. Íbamos para Deseado, nunca un puerto tuvo tan buen nombre visto desde el desierto de tierra. Teníamos que llegar, queríamos llegar rápido, el barco se iba y nosotros debíamos ir en el.
- No sabia que habías sido marinero
- y muchas otras cosas, pero marinero no llegue a ser
- como?
- es que la camioneta a mitad de la nada, se plantó, ni un ruido, ni vapor, ni olor, solo se plantó.
- y que hicieron?
- Roberto que venia conmigo, me dijo, fijate vos si sabes algo de mecánica.
Yo de mecánica sabía la cara del mecánico, la mugre del trabajo, donde estaba el motor y como llamar al auxilio pero allí no había medios para comunicarse.
Abrí el capo y miré, toque, golpetee, tironee, reenchufe, mire el agua entre vapores asesinos, mire el combustible, mire hasta el aire de las ruedas y nada.
- Y Roberto?
- Eso es lo extraño, Roberto ya no estaba en el auto, andaba por el medio del campo juntando ramas verdes
- para?
- vino al rato y me dijo, Flaco, sacate la pava que vamos a hacer un fueguito y nos cebamos unos mates!.
Che, dice Laura con aire preocupado, todos tienen las llaves de un depto que recién alquilo y yo mismamente no se la dí a naides. Soy una solterona muy celosa de su privacidad ...
Me lo encontré a Javier por la calle mirando un papelito y me dio unas llaves y me dijo que eran de tu nuevo departamento.
¿Ya no se usa tocar timbre?, dice Laura con aire de estar a punto de matar a alguien. Inmediatamente escucha con la cabeza lo que Gustavo dijo un par de minutos antes y pregunta: ¿Qué le pasa a Marina, Alaspies? ¿Estás preocupado?
Y ahí no más pone la pava y piensa en que si mate, en que si café y que su mañana está podrida pero que uno de estos zanguangos angustiados bien valen una mañana podrida.
Dice zafras nafras, se va al dormitorio, guarda la Smith y piensa que sus deseos de matar quedarán para mejor ocasión. En fin, de nuevo le toca jugar el papel de la buena samaritana -a ella, la bruja mala de los cuentos; a ella, la mala delincuenta de las pelis.

Fin de Capitulo 1