sábado, 29 de septiembre de 2007

la felicidá ja ja ja ja

Para los que dimos el examen de ingreso
Tenemos 12 o 13 años, nos hemos pasado un año preparándonos para dar el examen de ingreso al Colegio. Las fantasías que cada uno de nosotros tiene respecto de ese edificio son distintas.
En mi caso están los cuentos de mi padre, ex alumno del Colegio, y los cuentos de mi padre acerca de los cuentos del primo muerto de mi padre en el Colegio. También están mis hermanas y los cuentos de mis hermanas acerca del Colegio. Pero también estoy yo, siendo chica y yendo al Colegio a ver las obras del Teatro de Colegio, y a escuchar los recitales del rock en el Colegio. (Ahora me doy cuenta que para mí, en mi propia experiencia, el Colegio fue primero el Salón de Actos)
Entonces Pedro Henríquez Ureña se mezcla con Hugo Sata, y las armas sobre los pupitres en la década del '30 con los muertos de Trelew de 1972.
... y mis hermanas mayores llenas de amigos y de amores, de discusiones y de encuentros.
Me he pasado un año yendo a lo de la de Giuliano para preparame para el examen de ingreso. Puedo recordar con nitidez a Miguel, a María Laura, a José, a Juan José -mi compañero de la Escuela 10 que se preparó con nosotros y que no entró al Colegio-, yendo y viniendo por la calle 6 todos los días. Puedo recordar con nitidez las redacciones, el sobrehueso que se me había armado en el dedo mayor de la mano derecha de tanto escribir palabras agudas, graves y esdrújulas. Puedo recordar la emoción de las dos mañanas en las que fuimos a rendir.
¿Me impusieron o elegí ir al Colegio? No lo sé. Era un mandato que yo asumí como propio. Era un desafío que había que intentar.

Es un día de diciembre y yo voy a ver los resultados del examen de ingreso. Entré. La felicidad ja ja ja ja -a pesar de Palito Ortega.

lunes, 24 de septiembre de 2007

En busca de un mundo perdido

Perros malescos!
  1. Reflexion.
tomaremos el colegio,
lanzaremos misiles pindapoy
leeremos unas pancartas-
prometemos esta vez, no sostener a la bruja en el vacio,
temo que vuele o peor, que nos ponga en situacion comprometida.
Leti Bee decia el carameloso mk cartney,
los romanticos tendran su espacio, con lolipops, mediahora y chucola
los tiernos, un homenaje y un globo rojo
la derecha una izquierda.

Con la tecnologia poco se goza decia cedron y por eso no me entusiasma la compu
sera tambien que en los setenta todo pasaba por un geloso o un sony, un fogon en la arena y gente
Los libros decian, son peligrosos, muchos fenecieron en la hoguera (algunos tal vez lo merecian)
casi los prefiero igual que la musica, son casi gente viva y eso esta bueno
No acepto la idea de la donacion de esperma porque a esta altura sería inviable


Reunirse un 12 de octubre, por mas que la abuela entusiasme a mas de uno
es imperialista del siglo XVX, antipueblosoriginarios y complica el findesemanalargoargentino
en fin que sea lo que sea, que vayan los que vayan caiga quien caiga.
Es mas, les doy el changui a todos los ausentes sin aviso, a los que avisaron tarde y
a los que siempre tenemos presentes porque no van nunca a ningun lado
Sin resentimientos!

sábado, 22 de septiembre de 2007

Centro de estudiantes ESTAMOS PODRIDOS DE...

con este sencillo acto, el suscrito da por abierta la lista ESTAMOS PODRIDOS DE... que se publica en este blog al solo efecto de no generar rispideces con yahoo.

  1. De los que invitan y no van
  2. De los que de tanto dudar entre nuestras conspiraciones y aburridas fiestas con amigos se quedan viendo a tinelli
  3. De los que llaman y dejan mensajes en el contestador avisando que no llegaran a donde nunca esperamos que llegaran
  4. De alardear sentandonos en el piso cuando hay sillas
  5. De los que sufren la informatica

Nuestro pequeño mundo

Alguien sabe si los lugares tienen un lugar?, ayer perdi la cuenta si era saludable acordarse de alguien, si la historia era cierta. A las 20.30 entraba a plaza italia buscando muchedumbres, las habia y estaba bueno, unos cuantos cuerpitos calientes embebidos en alcohol y la yerba buena de los griegos que segun el flaco se llama kanakis svativa y significa " se apago!".
En fin, resignado a las multitudes, busque al convocante, Fats ssteelhand cuando un movil bonaerense me enfoca y se viene al humo, rapidamente dije "Canta laura la tres veces pinti, que pasen de largo y encuentren a lopez!", cuando despertè, estaba esacionado sobre la vereda con un paisano debajo de la camioneta que por suerte es bastante comoda y espaciosa por debajo, baje el vidrio y pregunte "Estas bien?, lo viste a manaserrrro?". Creo que dijo se fue por alla!, pedi disculpas y sali a todo escape.
Encontrar el centro como todo lo importante es dificil, por suerte haber aprendido el metodo cientifico me sirvio de algo (prueba y error, llegue y por lo tanto el metodo sirve. Y ademas comprobe que la mayor parte de los que llegaron antes o despues usaron el mismo metodo). En ese momento pense en Alvarito Jelves, seguramente debe estar todavia buscando en la entrada a Estancia Chica al Profeta Loedell, sin exito espero.
El profeta como todos los que conocen su metier, habia cortado la luz de la calle y bien en la penunbra para los connaisseurs un mensaje, una señal para los entendidos: Pasen y vean, estamos en el fondo, usen la puerta del garage, el centinela hara fuego".
El que hubiera llegado el Dr Ronkeros me tranquilizó, que pase primero y vemos si lo del centinela es cierto (no lo deje leer la nota no fuera cosa que tuviera que esperar a otro incauto).
En el interior, habia un conclave de honorables ancianos en torno del guru loedell y algunas bellas señoritas, estos cultos modernos si que saben hacer las cosas, ropitas apretadas, poquita ropa, poca competencia y ademas no estaban ni ssteelhand ni su guardapanza skinhead Pizziko.
En el aire flotaba (no frotaba) un suave olor a incienso, preservative karma mezclado con el aroma a patas y filtros de puchos mal apagados. El guru salio a recibirnos con unos vasos de plastico que contenian tal cual lo habiamos supuesto un brebaje iniciatico, nos abrazó no tanto por afecto sino ( me di cuenta) para palparnos de armas. En buenos aires habia dejado al tormento malsano quien me habia dicho, el arma ponetela en el culo, nunca en los zapatos, te los hace sacar un poco por eso y otro porque le encanta ver los tobillos de las chicas en zoquetes, es un zadico. El culo es seguro, a lo sumo lo va a oler, a mi siempre me lo hace!. Dicho y hecho, nos olio, nos santurreo, alabo nuestros tobillos y los zoquetes haciendo juego. Pasamos la prueba, buen vino.

ayer nomás

Ayer nomás ... nos juntamos en la casa de la Vesícula Taoísta en City Bell, por dar unas coordenadas geográficas convencionales. Y digo esto porque por momentos tenía la sensación de estar en otro lugar mucho más distante de mi propia casa y mi vida cotidiana. Tal como nos había avisado el dueño de casa, cuando fuimos unos cuantos no fuimos pal fondo donde hay una construcción de madera, toda de madera con ventanas al jardín nocturno. Nos sacamos lo zapatos y nos sentamos en el piso -salvo una estadía corta del Jedi en una silla.
Salimos y entramos a fumar, y de paso miramos la luna, el jardín, los árboles viejos, una pileta - estanque que hay a un costado. No se imaginen un parque inmenso: todo tiene proporciones humanas, todo tiene la austeridad de las líneas puras, todo tiene la dimensión justa de lo que se usa y se vive, todo tiene olor a madera.
Desde afuera -las ventajas de ser fumadora compulsiva- se veía a la gente sentada, parada de a dos o de más, conversando y riéndose.
Se habló de todo: se hicieron planes para el 21 de diciembre, se habló mal de la gente, se habló bien de la gente, se habló de política, del pasado y de nuestro presente. Tomamos vino, tomamos mates, seguimos conversando, nos reímos mucho, nos pusimos serios, nos volvimos a reír. En fin, que la pasamos bien.
(Esto es nada más que una presentación de la cosa. Habrá otros -¿los habrá?- que sigan con la crónica o con la descripción, como en un cadáver exquisito)

sábado, 15 de septiembre de 2007

presente -o filosofía barata y zapatos de goma

Para el Jedi
¿Todo concluye al fin?
Creo que una de las características de la adolescencia es esa sensación de inminencia y finitud que refleja la canción de Vox Dei. Con el tiempo he empezado a pensar que, al fin, nada concluye. Hay una especie de continuum, a veces más evidente, a veces más soterrado. El tornillo desatornillándose, un caramelo chucola deshaciéndose en una boca infantil, el pantalón Wrangler de corderoy marrón, la cólera del Pélida Aquiles, una mirada rauda en la galería del segundo piso, una mano en una fiesta, un estrépito, todo eso está allí -o aquí- constituyéndome, dándome identidad, casi casi como las cadenas de ADN.
Me acuerdo versus No me acuerdo es una falsa opción. Porque lo que no es posible es el olvido en un sentido hondo: dejar de ser quienes somos, con nuestras historias, catastróficas o ínfimas –o con algunas ínfimas catástrofes. ¿Me acuerdo o no me acuerdo del momento en que me rompieron el corazón por primera vez? No me acuerdo del instante preciso, pero ese instante forma parte de mi educación sentimental de allí –de aquí- y para siempre.

domingo, 9 de septiembre de 2007

pupitre marrón

A la mersonada de ponerles títulos de canciones paradigmáticas de los 60 - 70 a mis posts en el blog, agrego la mersonada de poner títulos de Vivencia. Sé que con esto me gano los odios de Tormento Malsano, pero ...
La cámara se da vuelta y asume el punto de vista del que está sentado en un pupitre, en un viejo pupitre atornillado al piso. Una de las diversiones de primer año era desatornillar los pupitres y hacer carreras en el aula y a veces sacar los bancos y hacer carreras en la galería del segundo piso.
Otra de las diversiones era aterrorizar a los practicantes.
La foto es en medio de una clase de una practicante de matemática. La chica tenía, pobrecita, una serie de discapacidades -la llamábamos "la torcida". Para colmo intentaba manejarnos con el rigor de las notas y las suspenciones. Se le notaba demasiado el miedo que sentía. Una de las últimas clases nos confabulamos para ir adelantando las filas de bancos lentamente cada vez que ella se daba vuelta para escribir en el pizarrón, hasta que la dejamos acorralada contra la pared y se fue medio puchereando. Ella perdió las prácticas de la enseñanza y nosotros nos quedamos lo más tranquilos.


Otra foto:
Estoy en el aula de 4º. Aparece Gustavo Oliva, nuestro preceptor, y nos dice que vamos a tener un nuevo compañero en la división. Es uno de Novena, que ha sido echado del colegio y que el lobby conjunto de una serie de almas caritativas ha logrado reincorporar, pero cambiándolo de división: debe seguir en Tercera, una división con chicas y mucho menos conflictiva que Novena.
Los pupitres, a diferencia de los del aula de primer año, son de los viejos de madera, que conectan el asiento del banco de adelante con la mesa del banco de atrás. Yo, miope vergonzante, me siento en el primer banco de la segunda fila. En el primer banco de la primera fila se sienta Lacha, con quien hemos descubierto ese año que tenemos muchas cosas en común y conversamos largo y tendido. Cuando llega Manzanos -de él se trata- se sienta en el banco que está justo detrás mío y empieza a mover la pata a un ritmo feroz. Dada la conexión de los pupitres, mi asiento entra en un terremoto bailable que me deja en estado de parkinson temprano y exógeno. Ahí nomás me doy vuelta y me enfrento a la cara enfunfurruñada y de pocos amigos del peor de todos y le pido amablemente que deje la pata quieta. Me ladra, me gruñe, me escupitajea un par de palabras, e inexplicablemente nos hacemos amigos.