viernes, 30 de diciembre de 2011

un dia

Sabes que volveré mil veces a tu puerta, mujer. Sabes que siempre estaré volviendo por mas que me haya ido que no hay camino sin nuestros pasos, ni sabana sin nuestro olor ni noche vacía de sueños.
Estoy tratando de recordar un sentimiento que nació un día que ya no estuve, que la puerta se abrió y el camino estaba ahí, atrapalasensacióndelonuevodesconocidoencantador.
Y me subí, y detrás de mi, te fuiste esfumando como si la noche cayera lentamente sobre el campo yerto y no tuviera mas lugar en la tierra que en el paso siguiente hacia adelante. elvacioquesederrumbaanteladesesperación ásperayquieta.
No hay manera de dar la vuelta, andando torpemente, andando. Solo una palabra, tan solo, una, esa, la que me dijiste: volvé.

No hay comentarios: